Personal de recepción, habitaciones y camareros, muy atentos y agradables. Habitación muy amplia y cómoda, pero con desperfectos en paredes, mobiliario, luces fundidas y azulejos en baño rotos, pero sin ser algo grave.
La comida excelente, muchas variedad y con productos de muy buena calidad y muy bien cocinado.
El único pero es el horario de piscina, cierra a las hora de comer y por la tarde a las 20:30, por lo que apenas se puede disfrutar si vas a la playa.
En general excelente y muy recomendable. Sin duda volveríamos a repetir.