Un alojamiento adecuado para una corta distancia.
El edificio es espectacular, un edificio antiguo que tiene mucho estilo, un antigua oficina de correos.
La sala de desayuno está un poco escondida, casi no la encontramos :) ofrecen un desayuno gratuito y bastante variedad.
La señora en la recepción muy simpática, nos ayudó con las indicaciones de movernos en la ciudad.
Hay parking gratuito.
Nuestra habitación tenía mucha altura, el aire acondicionado centralizado estuvo a tope y teníamos mucho frío. En la recepción nos dieron un calefactor, gracias por el detalle.