La habitación nos ha parecido excelente, el baño está perfecto, se nota que lo han remodelado hace poco. La habitación es muy cómoda, llena de luz por los enormes ventanales, la cafetera perfecta, y la lavadora/secadora funciona muy bien.
Inconveniente: tuvimos la mala suerte que el ascensor hacía las habitaciones superiores estaba estropeado, y nuestra habitación estaba en el último piso, el 7o, así que tuvimos que subir escaleras cada vez.
Negativo: el desayuno. Está incluido en el precio, pero es muy escaso. Recomendamos desayunar fuera.